Laberinto

Devoré la luz, y en un instante se hizo la noche.
Veo la oscuridad, al diablo y la mujer.

Entre lo increíble, lo cierto y lo real
hay un foco que alumbra el laberinto y la claridad.

Parece que el cuervo canta como gorrión
y que el águila es acechada por la luz.

No quiero crearle molestias al Sol,
pero mira que te veo en la Luna.


1 comentario:

  1. Vaya poeta que saliste.
    de las penumbras de una fachada pasada de moda.
    :)

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