Derrocho horas serenas,
horas de madrugada y de calma
por estar pensando en ella.
Mis horas pensando en ella
son tan útiles como cortar flores
y confinarlas a un bellísimo jarrón.
No hay tristezas, ni alegrías,
no hay vida ni es esto una ironía,
es sólo una flor cortada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario