Oda al hogar de la Sirena

¿Qué es aquello que se oye
en los altos oleajes?
Escucha al mar, al viento,
al atardecer que le habla
a tus ojos, relumbrante farol,
enloquecida y rábica candela.

Acaba de romper el oleaje
contra la costa, moviendo
rocas y algas,
menguante desierto, a momentos,
arena seca y calor ardiente.
Oasis reluciente, en instantes,
próximos y románticos,
perfecto hogar de mil cangrejos.

Plata de arena mojada,
rumor de guijarros viejos,
espuma de olas rotas,
palabras que hablan con
luces, farol, vela y candela,
arena, sol y marea.

Noche de amarillas huellas,
flechas y arcos perforan las
nubes y clarean el universo.
Sangre de flor cortada,
en lugar de estrellas fugaces.
Sal blanca, inconmensurable.

Opáceas lunas, amigas
cobardes de la media mañana,
coronitas gitanas a los
cantos de mil amores
que en barcos montan
sueños y promesas.
Claman luz de antiguos
soles, de miradas plenas.

Por agua que ondula,
camaleona de azul y
blancura.
Firme piel de toro
que respira rumor a eternidad.

3 comentarios:

  1. Como siempre es una delicia leerte.

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  2. Es un gozo recibir tan bellas palabras. Hoy escribí mucho. Te debo un café. El destino dice: pronto.

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  3. Me agrada esa bola de cristal con un futuro tan interesante. =)

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