Quisiera Ser

Quisiera ser tu madrugada,
aquella en la que despiertas
y puedes volverte a dormir.

Quisiera ser la cucharada extra
de azúcar que usas para tu café,
para endulzar tu día.

Quisiera ser tu nuevo par de zapatos,
tan nuevos y tan bellos
que te dan miedo desgastarlos.

Quisiera ser el azul del mar,
aquel azul con el que recuerdas la playa
en donde fuiste muy feliz.

Quisiera ser la soledad que te acompaña
cuando haces lo cotidiano,
cuando caminas a donde sea a diario.

Quisiera ser la pasión por tu trabajo,
aquella con la que efectúas todo a la perfección,
aquel objeto de tu plena dedicación.

Quisiera ser una goma de tu estuche,
con la que borras tus errores
y escribes versos radiantes y enamorados.

Quisiera ser el presente,
para estar siempre en tus días,
y el futuro que llega y se vuelve el momento.

Quisiera ser el tu interruptor de luz,
para iluminar tu oscuridad,
para que me acaricies con suavidad.

Quisiera ser las ojeras de tus ojos,
aquellas que obtienes tras desvelarte,
aquellas que presumes por pasarla bien.

Quisiera que me quisieras,
quisiera ser el objeto de tu deseo,
quisiera ser a quién quieres.

Quisiera ser tu todo
y que me pidieras nada,
quisiera ser; tú y yo, y nada más.

Quisiera ser aquel en quién ves todo,
toda la luz y ames mi oscuridad,
quisiera ser con quien me sienta bien de mis penas,
quisiera ser a quién le cuentas las tuyas.

Quisiera y quiero,
quisiera ser quién quiere menos...

Creo que a fin de cuentas el querer (te) nunca se va a terminar.

1 comentario: