Ganas de llorar

¡Cuántas ganas de llorar!
El corazón dicta las lágrimas,
la mente tiene poco que ver
con lo que el alma dice.

¡Cuántas ganas de llorar!
Y sin embargo no es posible,
no puedo más lágrimas derramar,
no hay posibilidad de llorar.

Tú no me ves, no ves nada,
absolutamente nada logras ver,
ni mis ojos cristalinos,
ni mis lágrimas pasadas.

Puedo ver, mejor dicho,
si pudiera ver lo que ocurre
tras tus ojos y cual es la verdad,
dejaría de ser una tragedia.

¡Cuántas ganas de llorar,
por no saber que va a pasar!
¡Cuántas ganas de llorar
por no poderte ver!
¡Cuántas ganas de llorar
por tenerte que extrañar!
¡Cuántas ganas de llorar
por esta tristeza amplia como el mar!