Un hasta luego...

Devoramos el espíritu,
creamos un monstruo
que rompió al amor,
sin piedad ni misericordia,
la fe en ti no sirvió de nada.

La fe que tenía en tu amor
no valió como esperaba.

Ahora tengo que reconocer,
que eres tu quién se despide
de mi, como lo hice de ti.

La diferencia es que para mi,
no era un adiós, sino un hasta luego...

No hay comentarios:

Publicar un comentario