Cierro mis ojos y guíame.
Cerremos los ojos y creamos.
Pintaré un paisaje, con los ojos cerrados
y tu silencio aquí te deja inmóvil.
Yo dibujaré cualquier pequeño gesto que tengas.
Ahora que soy invisible no te acordarás de mi.
Pintare, con los ojos cerrados
cualquier momento del que me acuerde,
y tu, los borraras con tu goma de olvido.
Te acercaste lo suficiente para envenenarme,
y ahora me arriesgo a estar sin ti,
sin antídoto, sin fuerza, solo atormentándome por tu partida
y me comienzo a borrar poco a poco.
Pintare, con los ojos cerrados, un momento,
que con mucha fuerza puedas recordar
y los tormentos serán compañía
y luego, se borrarán.
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